Urbanink
27 may 2012
26 may 2012
La Alameda Central recuperará su esplendor
La renovación de este parque de la capital mexicana “es urgente debido a que la Alameda se encuentra convertida, lamentablemente, en un muladar”, aseguró el cronista Guillermo Tovar.
Ciudad de México • La Alameda Central, el primer jardín público de América Latina, creado en el siglo XVI para el disfrute de la sociedad de la época, está siendo restaurada con la intención de que recupere su esplendor, ya que actualmente presenta graves problemas de envejecimiento y deterioro.
El cronista Guillermo Tovar y de Teresa, autor del libro La Ciudad de los Palacios, sostiene que esta “recuperación es urgente debido a que la Alameda se encuentra convertida, lamentablemente, en un muladar”.
De acuerdo con esta iniciativa de cooperación, el Keren Kayemet Leisrael envió a sus expertos forestales a la Ciudad de México, para que estudiaran los problemas ambientales y plantearan soluciones para su rehabilitación.
Tovar y de Teresa espera que con este proyecto, la Alameda recobre la grandeza que dejó plasmada Diego Rivera en su mural Sueño de una tarde dominical en la Alameda.
“Para ello, recibiremos ayuda de Israel, quien nos orientará en la recuperación de los árboles, ya que en ese país están los más importantes expertos en riego, vendrán esos técnicos a realizar una transferencia de tecnología de riego por goteo”.
En entrevista con MILENIO, dice que se trabajará intensamente durante estos primeros meses, aunque las acciones de recuperación de la Alameda, que tendrán un costo de 120 millones de pesos, serán todo el año.
Por lo que toca a la recuperación de las esculturas, las fuentes y el kiosco que se encuentran en la Alameda, se realizará bajo las reglas de preservación y conservación de monumentos, aclara Felipe Leal, secretario de Desarrollo Urbano y Vivienda (SEDUVI).
La Alameda cuenta con el Hemiciclo a Juárez y 10 fuentes, seis con esculturas de bronce: La Victoria, Neptuno, Mercurio, Las Danaides, Venus y La Primavera. Además de las réplicas de las esculturas en mármol: Malgré Tout, Desespoir, Bacante, dos Gladiadores –las obras originales se encuentran desde 1986 en el Museo Nacional de Arte del INBA–.
Otra de las piezas a preservar es el monumento al músico Ludwig van Beethoven, del escultor Teodoro Von Cosen, que en 1921 la colonia alemana regaló al pueblo de México.
Felipe Leal calcula unos seis u ocho meses para recuperar las obras y concluir los trabajos materiales. Sin embargo, señala que reverdecer los árboles, se llevará más tiempo.
Felipe Leal calcula unos seis u ocho meses para recuperar las obras y concluir los trabajos materiales. Sin embargo, señala que reverdecer los árboles, se llevará más tiempo.
Concebida como obra de arte
Por su importancia, la Alameda Central ha merecido monografías y libros dedicados a su análisis, sostiene el cronista de la Ciudad de México Guillermo Tovar y de Teresa. El historiador explica que este jardín, creado con una idea renacentista, “era un paseo muy representativo de la vida citadina, que al paso de los años ha perdido mucho de su decoro, su imagen y hasta su salubridad, ya que está vuelto un basurero”.
Este paseo fue construido en 1593 sobre los terrenos del Tianguis de San Hipólito, diseñado por Cristóbal Carballo, con tres portadas de piedra. En su momento, el virrey Revillagigedo ordenó que los días de fiesta se colocara un centinela en cada puerta para impedir la entrada a toda clase de gente de mantas o frazadas, mendigos, descalzos, desnudos o indigentes.
Fuente: http://www.milenio.com/cdb/doc/noticias2011/215cf5be355aeb0b371d1f895dacc136
Rehabilitación de la Alameda Central y su Entorno Primera Etapa
El proyecto comprende la rehabilitación de la Alameda Central y su perímetro, con un área de 35,000 m2 de espacio público en la Delegación Cuauhtémoc, mediante las siguientes acciones:
- Adecuación y reconfirmación geométrica (altimetría y planimetría).
- Renovación de pavimentos en andadores perimetrales de la Alameda Central mediante la colocación de piezas de mármol Sto. Tomás.
- Renovación de pavimentos en andadores perimetrales de la acera norte de Av. Juárez en su tramo Paseo de la Reforma-Balderas.
- Consolidación de vegetación existente en el borde del Perimetro de Alameda Central mediante la siembra y trasplante de Magnolias y Jacarandas.
- Renovación de vegetación en la acera Norte de Av. Juárez en su tramo Paseo de la Reforma-Balderas con la siembra de Palmas Phoenix.
- Colocación de nuevas luminarias peatonales así como la reubicación de luminarias vehiculares del área a intervenir.
- Ordenamiento y homogenización de mobiliario existente.
La fecha de inicio de los trabajos es el 5 de marzo de 2012 y concluyen el 1 de octubre de 2012.
Edificios del DF sirven como lienzos para murales
Ciudad de México.- Algunos de los edificios más emblemáticos de la capital de México, un país con una gran tradición muralista, son el lienzo sobre el que plasman estos días sus llamativas y originales obras artistas locales, estadounidenses y europeos.
En pleno centro histórico, las paredes del periódico El Universal, uno de los más antiguos de la ciudad, fundado en 1916, son el particular lienzo en el que el dúo alemán Herakut y el ucraniano Interesni Kazni pintan a varios metros del suelo.
Con máscaras para protegerse de los gases de la pintura, sombreros contra el sol y subidos en una grúa trabajan casi sin descanso desde el pasado lunes, cuando dio comienzo el festival de arte urbano All City Canvas, y lo harán hasta este viernes, día en que vence el plazo para la concluir las obras.
Procedentes de las ciudades alemanas de Frankfurt y Erfurt, los artistas Hera y Akut tratan de plasmar estados mentales, intuiciones y formas de ver su generación; mientras que los ucranianos AEC y Waone, influidos por la ciencia y la religión, exploran la fantasía con colores brillantes y una amplia escala cromática.
Así lo explicó a Efe Roberto Shimizu, arquitecto y cofundador del festival, tras precisar cómo el arte urbano se ha ido separando totalmente del grafiti y se ha convertido en uno de los movimientos más importantes del presente siglo.
“Creemos que obviamente el grafiti es parte de la técnica, del movimiento, pero realmente esto es una nueva vertiente, un nuevo muralismo, una evolución del arte público”, aseveró.
A juicio de este joven, que como el resto de organizadores apenas supera la treintena, el festival permite a México mostrar la riqueza cultural que posee, así como su bagaje histórico dentro del mundo del arte y sus innumerables aspectos folclóricos y de tradiciones.
El objetivo, aseguró Shimizu, es mostrar al mundo que en México “se pueden hacer festivales de calidad” y “cosas increíbles”.
A escasa distancia del Monumento a la Revolución, el artista mexicano Saner y el estadounidense El Mac pintan su mural en las paredes del Hotel Reforma Avenue, un edificio con más de 30 años que fue uno de los más lujosos de la urbe y un superviviente del devastador terremoto que sacudió la capital en 1985.
“Este festival pretende transmitir que el arte puede transformar ciudades y que esta es una ciudad para caminar y para interactuar”, explicó a Efe Andrea Ruiz Sánchez, coordinadora del evento.
El recorrido, que permanecerá abierto los próximos seis meses, continúa frente al majestuoso Palacio de Bellas Artes, donde el portugués Vhils trabaja en el llamado Edificio Dolores, en la entrada del barrio chino, fundado por inmigrantes de la provincia de Cantón en los años 20 de siglo pasado.
Vhils es conocido por ser uno de los artistas que más indaga en las técnicas, algunas tan innovadoras como el grabado con ácido, el cloro en madera, o el uso de cinceles y taladros para esculpir sus piezas en la pared; este último es el método que emplea en la obra que presentará en el festival.
“Queríamos mostrarles a los artistas mexicanos lo que se está haciendo en otros países, pero también representar a los artistas de aquí” y mostrar al mundo su “talento”, indicó Ruiz.
El Edificio Chihuahua en Tlatelolco, el Hotel W Mexico City en Polanco, el Hotel Plaza Madrid, muy cercano a la Zona Rosa, y el Edificio Paraguay, ubicado en el corazón del barrio popular de La Lagunilla, conforman este recorrido de arte callejero, que incluye a los artistas españoles Aryz y Escif.
“El muralismo en México es importantísimo, pero buscábamos hacer un nuevo muralismo, curado y seleccionado por nosotros, jóvenes mexicanos, y volver a poner a México como centro de arte, porque somos la ciudad con más museos del mundo, pero había que sacar el arte de los museos y ponerlo en los muros”, resaltó Ruiz.
Además de ilustrar simbólicos edificios de la urbe, en el marco del festival se ofrecen conferencias y exposiciones a lo largo del mes de mayo, todo ello canalizado a través de las tres vertientes en las que han dividido las actividades: paredes, palabras y piezas.
“El arte mucha gente no lo ve como algo tan importante, pero nosotros sí creemos que puede ser transformador, modifica la forma de pensar de la gente”, sentenció la coordinadora del festival.
En pleno centro histórico, las paredes del periódico El Universal, uno de los más antiguos de la ciudad, fundado en 1916, son el particular lienzo en el que el dúo alemán Herakut y el ucraniano Interesni Kazni pintan a varios metros del suelo.
Con máscaras para protegerse de los gases de la pintura, sombreros contra el sol y subidos en una grúa trabajan casi sin descanso desde el pasado lunes, cuando dio comienzo el festival de arte urbano All City Canvas, y lo harán hasta este viernes, día en que vence el plazo para la concluir las obras.
Procedentes de las ciudades alemanas de Frankfurt y Erfurt, los artistas Hera y Akut tratan de plasmar estados mentales, intuiciones y formas de ver su generación; mientras que los ucranianos AEC y Waone, influidos por la ciencia y la religión, exploran la fantasía con colores brillantes y una amplia escala cromática.
Así lo explicó a Efe Roberto Shimizu, arquitecto y cofundador del festival, tras precisar cómo el arte urbano se ha ido separando totalmente del grafiti y se ha convertido en uno de los movimientos más importantes del presente siglo.
“Creemos que obviamente el grafiti es parte de la técnica, del movimiento, pero realmente esto es una nueva vertiente, un nuevo muralismo, una evolución del arte público”, aseveró.
A juicio de este joven, que como el resto de organizadores apenas supera la treintena, el festival permite a México mostrar la riqueza cultural que posee, así como su bagaje histórico dentro del mundo del arte y sus innumerables aspectos folclóricos y de tradiciones.
El objetivo, aseguró Shimizu, es mostrar al mundo que en México “se pueden hacer festivales de calidad” y “cosas increíbles”.
A escasa distancia del Monumento a la Revolución, el artista mexicano Saner y el estadounidense El Mac pintan su mural en las paredes del Hotel Reforma Avenue, un edificio con más de 30 años que fue uno de los más lujosos de la urbe y un superviviente del devastador terremoto que sacudió la capital en 1985.
“Este festival pretende transmitir que el arte puede transformar ciudades y que esta es una ciudad para caminar y para interactuar”, explicó a Efe Andrea Ruiz Sánchez, coordinadora del evento.
El recorrido, que permanecerá abierto los próximos seis meses, continúa frente al majestuoso Palacio de Bellas Artes, donde el portugués Vhils trabaja en el llamado Edificio Dolores, en la entrada del barrio chino, fundado por inmigrantes de la provincia de Cantón en los años 20 de siglo pasado.
Vhils es conocido por ser uno de los artistas que más indaga en las técnicas, algunas tan innovadoras como el grabado con ácido, el cloro en madera, o el uso de cinceles y taladros para esculpir sus piezas en la pared; este último es el método que emplea en la obra que presentará en el festival.
“Queríamos mostrarles a los artistas mexicanos lo que se está haciendo en otros países, pero también representar a los artistas de aquí” y mostrar al mundo su “talento”, indicó Ruiz.
El Edificio Chihuahua en Tlatelolco, el Hotel W Mexico City en Polanco, el Hotel Plaza Madrid, muy cercano a la Zona Rosa, y el Edificio Paraguay, ubicado en el corazón del barrio popular de La Lagunilla, conforman este recorrido de arte callejero, que incluye a los artistas españoles Aryz y Escif.
“El muralismo en México es importantísimo, pero buscábamos hacer un nuevo muralismo, curado y seleccionado por nosotros, jóvenes mexicanos, y volver a poner a México como centro de arte, porque somos la ciudad con más museos del mundo, pero había que sacar el arte de los museos y ponerlo en los muros”, resaltó Ruiz.
Además de ilustrar simbólicos edificios de la urbe, en el marco del festival se ofrecen conferencias y exposiciones a lo largo del mes de mayo, todo ello canalizado a través de las tres vertientes en las que han dividido las actividades: paredes, palabras y piezas.
“El arte mucha gente no lo ve como algo tan importante, pero nosotros sí creemos que puede ser transformador, modifica la forma de pensar de la gente”, sentenció la coordinadora del festival.
fuente: http://www.notisistema.com/noticias/?p=491656
Treinta años de deterioro en la Zona Rosa
Hace 30 años era el lugar bohemio por excelencia de pintores, escritores, poetas, actores y músicos en la ciudad de México. Hoy es sitio de restaurantes, hoteles, antros, tráfico, indigentes, drogadictos y fiesta permanente para la comunidad lésbico-gay. De rosa ya tiene muy poco. (Mar, 27 Nov 2007).
Más de 70% de sus habitantes se han mudado a otras partes de la ciudad, según Alberto Kuhn, ex presidente de la asociación de colonos. Huyeron del ruido y la guerra de los decibeles, basura, prostitución, tugurios, inseguridad y en general, el ataque a su privacidad. Los que se quedaron se sienten amenazados por quienes quieren comprar sus casas es para hacer negocios.
Encuadrada entre las avenidas Reforma, Chapultepec, Florencia y Niza, en la colonia Juárez, delegación Cuauhtémoc, la zona adquirió ese nombre en 1967, a iniciativa del pintor y escultor José Luis Cuevas y otros artistas.
Antes era la colonia Americana. Se fundó en la época de Porfirio Díaz, y se impregnó del boom de lo francés. Llegaron ahí familias adineradas, inmigrantes y diplomáticos, particularmente estadounidenses y alemanes.
Los Cortina, los Cervantes, familias de abolengo, construyeron grandes casas al estilo europeo, con acabados románticos, balcones y ventanales, obra de renombrados arquitectos. Los nombres de sus calles sugieren un recorrido por Europa: Génova, Hamburgo, Estocolmo, Copenhague, Londres, Liverpool, Amberes. Pero de todo eso sólo quedan los letreros en las esquinas.
Habitante de la zona desde hace más de 30 años, Alberto Kuhn lamentó que -las casas majestuosas que teníamos de época, sobre todo de la porfirista, están destruidas totalmente, convertidas en bodegones con colores horrorosos que le han dado un mal aspecto a la zona. Es lamentable la pérdida que hemos tenido de todo-.
El apogeo de la Zona Rosa se dio en los años 50 y 60. Entonces era muy común tomar café y tener charlas literarias en el famoso Quineret y El Chips en la calle Génova.
Eran los espacios favoritos de Carlos Monsiváis, Manolo Fábregas, Manuel Felguérez, Rius y hasta actores como César Costa. No era raro ver a Pita Amor declamando en plena calle. Abundaban las librerías, las galerías de arte y las joyerías de corte internacional, de las cuales ya sólo quedan dos en la calle Amberes.
En el salón de baile El Jacarandas, donde hoy está un restaurante de hamburguesas, se hacían grandes bailes y conciertos de la talla de la orquesta de Ray Conniff. Eran los años 60.
Rocío Garfias, habitante desde 1989, recordó: -Era una zona bohemia, era bonito salir en las tardes, tomarte un café y te encontrabas a gente del ámbito artístico, literatos-. Ella conoció ahí a su esposo que fue fundador de la plaza del Ángel, donde se venden antigüedades, pero ahí mismo lo perdió cuando la baja en las ventas y el deterioro de la zona le provocaron estrés y padecimientos que terminaron por ocasionarle la muerte. Hoy, considera que terminará por mudarse por el bien de sus tres hijos menores.
Cuarenta años después de su fundación, la Zona Rosa se ha teñido de arcoiris, de rojo y hasta de negro. Hoy existen sex shops, bares, discotecas, restaurantes y hasta prostíbulos coreanos, según las denuncias de los mismos residentes. Peor aún: los ambulantes que fueron desalojados de la glorieta de Insurgentes, se apoderaron de la parte central de Génova.
La Zona Broza, le llama Alberto Kuhn, quien además señaló la cantidad de basura y autos de dependencias del gobierno federal y capitalino que obstaculizan las calles.
Hace poco más de un mes, el GDF inició el programa de rescate integral de la zona para realzar su imagen y atraer al turismo y las inversiones. En una primera etapa, en las calles Génova, Hamburgo y Copenhague se sustituyen drenaje y cableado subterráneo, y se ordenan las terrazas; obras que, asegura, estarán listas a finales de 2007.
Encuadrada entre las avenidas Reforma, Chapultepec, Florencia y Niza, en la colonia Juárez, delegación Cuauhtémoc, la zona adquirió ese nombre en 1967, a iniciativa del pintor y escultor José Luis Cuevas y otros artistas.
Antes era la colonia Americana. Se fundó en la época de Porfirio Díaz, y se impregnó del boom de lo francés. Llegaron ahí familias adineradas, inmigrantes y diplomáticos, particularmente estadounidenses y alemanes.
Los Cortina, los Cervantes, familias de abolengo, construyeron grandes casas al estilo europeo, con acabados románticos, balcones y ventanales, obra de renombrados arquitectos. Los nombres de sus calles sugieren un recorrido por Europa: Génova, Hamburgo, Estocolmo, Copenhague, Londres, Liverpool, Amberes. Pero de todo eso sólo quedan los letreros en las esquinas.
Habitante de la zona desde hace más de 30 años, Alberto Kuhn lamentó que -las casas majestuosas que teníamos de época, sobre todo de la porfirista, están destruidas totalmente, convertidas en bodegones con colores horrorosos que le han dado un mal aspecto a la zona. Es lamentable la pérdida que hemos tenido de todo-.
El apogeo de la Zona Rosa se dio en los años 50 y 60. Entonces era muy común tomar café y tener charlas literarias en el famoso Quineret y El Chips en la calle Génova.
Eran los espacios favoritos de Carlos Monsiváis, Manolo Fábregas, Manuel Felguérez, Rius y hasta actores como César Costa. No era raro ver a Pita Amor declamando en plena calle. Abundaban las librerías, las galerías de arte y las joyerías de corte internacional, de las cuales ya sólo quedan dos en la calle Amberes.
En el salón de baile El Jacarandas, donde hoy está un restaurante de hamburguesas, se hacían grandes bailes y conciertos de la talla de la orquesta de Ray Conniff. Eran los años 60.
Rocío Garfias, habitante desde 1989, recordó: -Era una zona bohemia, era bonito salir en las tardes, tomarte un café y te encontrabas a gente del ámbito artístico, literatos-. Ella conoció ahí a su esposo que fue fundador de la plaza del Ángel, donde se venden antigüedades, pero ahí mismo lo perdió cuando la baja en las ventas y el deterioro de la zona le provocaron estrés y padecimientos que terminaron por ocasionarle la muerte. Hoy, considera que terminará por mudarse por el bien de sus tres hijos menores.
Cuarenta años después de su fundación, la Zona Rosa se ha teñido de arcoiris, de rojo y hasta de negro. Hoy existen sex shops, bares, discotecas, restaurantes y hasta prostíbulos coreanos, según las denuncias de los mismos residentes. Peor aún: los ambulantes que fueron desalojados de la glorieta de Insurgentes, se apoderaron de la parte central de Génova.
La Zona Broza, le llama Alberto Kuhn, quien además señaló la cantidad de basura y autos de dependencias del gobierno federal y capitalino que obstaculizan las calles.
Hace poco más de un mes, el GDF inició el programa de rescate integral de la zona para realzar su imagen y atraer al turismo y las inversiones. En una primera etapa, en las calles Génova, Hamburgo y Copenhague se sustituyen drenaje y cableado subterráneo, y se ordenan las terrazas; obras que, asegura, estarán listas a finales de 2007.
Fuente: http://www.arq.com.mx/noticias/Detalles/9559.html
Impulsan plan para Zona Rosa
MÉXICO, D.F., marzo 29 (EL UNIVERSAL).- Un parque lineal en Chapultepec, un proyecto integral en la Glorieta de Insurgentes, el Residencial Zona Rosa y un Museo y Mediática multimedia son los cuatros planes del Programa Parcial de Desarrollo Turístico de la Zona Rosa que entregó el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) a la Secretaría de Turismo del DF (Sectur-DF).
La dependencia local informó que el estudio que entregó el Fonatur durante las actividades del Tianguis Turístico 2012 que se realiza en Puerto Vallarta y la Riviera Nayarit, comprende cuatro proyectos para reposicionar a la Zona Rosa como uno de los principales destinos turísticos de la ciudad de México.
El director adjunto de Servicios de Apoyo al Servicio Turístico de Fonatur, Adalberto Füguemann, fue el encargado de entregar el Programa Parcial de Desarrollo Turístico de la Zona Rosa al titular de la Sectur, Carlos Mackinlay.
Restauranteros, hoteleros y comerciantes de la zona han denunciado en reiteradas ocasiones el olvido y desgaste en el que se encuentra el lugar turístico ubicado en la delegación Cuauhtémoc.
En septiembre del año pasado integrantes de la Asociación de Comerciantes de la Zona Rosa (Acozoro) demandaron a las autoridades intervención para atender la prostitución, inseguridad e indigencia que afectan el comercio y el turismo.
Además urgieron a terminar con el ambulantaje y regularizar los comercios.
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